Crepusculo

Por puro afán censor tuve que ver el hit de los últimos días "Crepúsculo". La razón fué que mi adolescente preferida se fumo literalmente 4 libros de 700 pags en un mes, de la mismo autora y -a palabras suyas- con la misma temática, es decir, una saga.

La sencillez con la que se insertan elementos nuevos en la conciencia actual es a veces para escandalizarse, sobre todo por la facilidad de seguir una simple formula con una historia maquillada, nada original, un par de actores "monos" en toda la extensión de la palabra y una campaña tanto espectativa como excesiva por la cantidad de medios donde aparecen, no solo en lo referente a la historia (película o libro), sino también la cantidad interminable de reportajes en los que al protagonauta se le critica hasta sus hábitos de higiene.

Retomando el inicio de este post al referirme al "hit de los últimos días" con toda intención; quiero hacer énfasis en la velocidad con la que se usan las modas y la consecuente facilidad con la que se desechan de igual forma, para nunca más volver. Algunos dirán que si recordarán a Bratz o a Bob esponja, o incluso al famosísimo Harry Potter, pero el fenómeno es igual de nuevo que la cultura del uso y consumo indiscriminado. Mis contemporaneo podremos recordar X cantidad de objetos, productos, programas y personajes, pero actualmente ni siquiera hay leyendas en el cine, en la música, incluso el propio Homero Simspson (personaje casi eterno) lo dice en un episodio a su ladillezco vástago "..estaremos al aire mientras los ejecutivos consideren que el show es rentable ..." En consecuencia las nuevas generaciones e incluso la mía no podemos dedicarnos ni siquiera a coleccionar...algo porque, inmediatamente habrá un sustituto más grande, más innovador y mas moderno, en todos los aspectos.

Tal vez es un poco radical pero después de ver como se violenta la mitología vampirica de Bram Stoker, de la maese vampira Ann Rice y de ver la cantidad de libros y discos que están emigrando a un formato electrónico "para llevar" se vislumbra un fin inminente para los amantes del coleccionismo o simplemente para todos aquellos que nos confortábamos con el sencillo y ancestral arte de la posesión y exhibición de esas nuestras posesiones en el librero de la sala. Pero esa es otra historia...

En conclusión: si no tienes menos de 16 años no leas o veas o te acerques a Crepúsculo, puedes tener daño permanente, llegaras a pensar que es mejor que Harry Potter, Dracula (cualquier versión), Entrevista con el Vampiro, Romeo y Julieta (si, los de Shakespeare) y lo peor es que hasta puedes pensar que es original.

Paz.