Clasicazo

Veamos:
Enterada del conocimiento crítico, culposo y verosímil sobre el tema de my dear Moxo, acepté inmediatamente la invitación para colaborar en este recinto maculado de cultura pop de los ayeres, tan infame como el amor que le tengo a ello. Y qué más prueba que mi afición terca al canal cómicomágicomusical Clásico TV, donde se transmiten verdaderas joyas de la tele mexicana, con una carga de nostalgia tan cabrona, que las regresiones a tiempos de sofá, huevos revueltos con sopa de fideo, café Legal con leche de la Conasupo y bolillo sopeado como merienda son im-pre-sio-nan-tes.
Programas como Ensalada de locos, Chiquilladas, Cepillín, Cachún Cachún Ra-Ra y qué decir de La carabina de Ambrosio, que fue emitido todos los lunes a las 9 de la noche, eran la delicia de chicos y grandes. Hoy los disfruto cuando sintonizo la señal. Sobre todo este último. Gran plan era reunirse en la sala y cagarnos de la risa con los scketches burdos, desmadrozos y espontáneos. Uno de mis favoritos.
Les dejo una probadita de tan magistral producción, mientras escucho "Rock Lobster" de B-52's en el canal especial de música ochentera. ¿Más lamentable mi caso? Neh, no creo.

Aplausos.